Centro de Interpretación del molino «Gigantes de La Mancha», sala de usos múltiples.
El arte, y sobre todo la pintura contemporánea, ha roto la mayoría de los
esquemas tradicionales, tanto en sus modos y formas, como en los materiales y
soportes.
He aquí una ruptura total en cuanto al soporte se refiere. Se ha abandonado
el clásico lienzo y todas las obras que presento en esta exposición se han realizado
sobre un botijo: La piel que cubre al agua.
A esta originalidad hay que añadir la categoría de los pintores que componen
esta colección: Dalí, Canogar, Sempere, Viola, Echauz, Perez Villalta, Úrculo,
Barjola, Forges, Mingote, Peridis, Alcorlo, Astudillo, Villaseñor, Lapayese del
Río, Pérez de Cossío, Madrigal, Povedano, Moro, Colis, Baixeras, Ramírez de
Arellano, Pepe Rubio, Sergio Gay, Javier Gómez, Santiago de Santiago, A.
Cristóbal, Tardón, Fernández Soravilla, etc.
Y ¿ por qué sobre un botijo?:
Porque el botijo es humilde, sencillo, y tan rendido y sumiso como un perro:
siempre al pie de su amo, y a mano de su amo; perro sin patas, pero con asa, y con
su vientre, dócil y amoroso para la caricia, cruce de meridianos y paralelos en la
ofrenda de la frescura.